sábado, 10 de enero de 2009

Darwin y la tecnología virtual

Este año 2009 celebramos el 150 aniversario de la publicación de El origen de las especies, la obra de Charles Darwin que revolucionó algunas de las bases fundamentales de la ciencia. Además, también se cumple el bicentenario del nacimiento de este naturalista que nunca llegó a ser académico. Nació en 1809 en Shrewsbury, Inglaterra, en el seno de una familia acomodada. La teoría de la evolución darwinista fue la primera de este género que superó rigurosos escrutinios científicos y sigue estando vigente en nuestros días. La importancia de esta aportación para la ciencia básica y para ciencias aplicadas como la biotecnología o la ciencia forense hacen que hablemos de la celebración de un acontecimiento de extraordinaria trascendencia. La teoría de Darwin constituye, junto con la teoría de la relatividad de Einstein y la mecánica cuántica, uno de los pilares de la ciencia moderna. Darwin desplazó del epicentro del mundo natural a la especie humana, de la misma manera que hizo Copérnico al desalojar a la Tierra del centro del universo.
Con motivo de esta celebración, la revista INVESTIGACIÓN Y CIENCIA, la edición española de SCIENTIFIC AMERICAN, ha publicado en su número correspondiente a este mes de enero, un excelente monográfico sobre la evolución y la actualidad de la teoría de Darwin. En dicho número podemos encontrar artículos muy interesantes sobre la influencia de esta teoría en la genética, la palentología o la psicología. También un curioso artículo firmado por Ed Regis, titulado Evolución Virtual, en el que analiza un juego de ordenador, SPORE, creado por Will Wright con una base científica muy consistente, y que permite manejar los procesos internos de la evolución basada en la selección natural. Así, los conceptos fundamentales de la teoría de Darwin son aplicados, en la idea de que algunas especies evolucionan siguiendo caminos distintos a partir de un ancestro común, de manera que la naturaleza prescinde de los individuos con características menos favorables para sobrevivir (adaptarse a un medio).
En este juego virtual la evolución corresponde a un proceso de diversificación de seres vivos con múltiples líneas de descendencia, que operan de forma simultánea. Si se juega "en línea", el jugador interactúa con otros jugadores, de manera que se pueden descargar las creaciones de estos en una "esporopedia" que incluye una variada selección de seres vivos, ambientes, objetos, etc.
La diferencia fundamental entre SPORE y la evolución por selección natural, radica en que en el juego hay un "creador consciente", algo que en la naturaleza no se da. Aunque esta perspectiva que propicia el juego, seguro que congratula a los creacionistas.

http://eu.spore.com/splash.cfm

1 comentario:

Gabriela Mariel Spadoni dijo...

Estimado Juan.

Muy interesante la info que compartes.

Te cuento también que hace un tiempo te he agregado a mi lista de blog en http://eduticsantafe.blogspot.com

Saludos desde Rosario - Argentina.

Gabriela.